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La kale es un tipo de col rizada que se encuentra incluida dentro de la familia de las coles.
Su consumo hoy en día ha aumentado considerablemente hasta el punto que se ha puesto de moda gracias a su fama de “Superalimento”.
Cada vez más, podrás encontrar una gran variedad de recetas, batidos y smoothies, que incluyen kale.
Bajo valor calórico: debido a que posee una elevada proporción de agua en su composición. Su aporte calórico ronda las 45 Kcal por cada 100gr

Vitamina A: 206% ~ Vitamina K: 684% ~ Vitamina C: 134% ~ Vitamina B6: 9% ~ Manganeso: El 26% ~ Calcio: 9% ~ Cobre: 10% ~ Potasio: 9% ~ Magnesio: 6% ~ Contiene un 3% de la de la dosis diaria recomendada de vitamina B1 (tiamina), vitamina B2 (riboflavina), vitamina B3 (niacina), hierro y fósforo.
Tiene un contenido muy escaso en fitatos y oxalatos o taninos, en comparación con otras hojas verdes.
Es un alimento muy rico en antioxidantes. Entre los que se incluyen el beta-caroteno, la vitamina C, así como diferentes flavonoides y poli – fenoles.
Nos ayuda a aumentar la cantidad de proteínas y fibra que ingerimos sin tener que pasarnos con los hidratos. Es por esto por lo que cada vez se utiliza más en el mundo del deporte.
La kale ayuda a la flora intestinal, gracias a su alto contenido en prebióticos. Por ello, a la larga lo agradeceremos, ya que es bastante beneficioso para nuestro organismo.
Para los que seguimos una dieta vegana, es una buena alternativa para adquirir proteínas vegetales, hierro y calcio.
Y no solo todo esto, también puede enriquecer muchos platos para una dieta détox, que estés haciendo o si estás buscando perder peso, ya que tiene un efecto saciante.

Si empleas alimentos ricos en vitamina C junto a la ingesta de la kale, te encontrarás con una magnífica manera de incrementar su absorción en el organismo, por lo que te será muy útil si quieres prevenir anemias nutricionales.
Y ya por último, te indico que otro beneficio de la kale, que te puede ayudar, es que reduce los factores de riesgo cardiovasculares.
Cuando es la temporada, como ya te he comentado antes, es un tipo de verdura que no puede faltar en tu despensa. Puede acompañar a guisos, ensaladas e incluso puedes hacerla simplemente al vapor con un poquito de aceite. Su sabor es un poco amargo, pero no es desagradable.
En la cocina, te recomiendo que la consumas a ser posible siempre fresca, para que mantenga al máximo sus propiedades.
Para poder cocerla y que su textura siga siendo la misma, igual de crujiente y apetecible, dale solo un punto rápido de cocción durante 5 segundos en abundante agua hirviendo y salada. Así, tras su preparación, no habrá perdido su gran cantidad de minerales y sus vitaminas hidrosolubles.

Sopas frías para el veranito, purés, cremas, o incluso hasta los famosos batidos dados por su sabor tan peculiar.
No te pierdas las innumerables propiedades de este vegetal y aprovéchate de sus beneficios, incorpóralo en tu dieta, porque estoy segura que lo agradecerás.
Bueno, espero que os haya gustado mi artículo. Os animo a cambiar esa rutina nutritiva por una mucho más sana y sencilla de preparar, saludos y que disfrutéis haciendo vuestras propias recetas de col Kale.

Emanuela Gornati
Healthy Coach & Vegan Chef
www.miobio.eu
www.emanuelagornati.es
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