La depresión es una alteración que puede cursar con sintomatología diversa, cambiante de unas personas a otras y con intensidades diferentes, afecta tanto emocional como físicamente, por ello es tan importante la terapia integrada.

Depresión y emociones

Entres los síntomas emocionales y/o psicológicos podemos citar: la incapacidad para el disfrute, la disminución de la autoestima, el estado de desánimo, la sensación de insatisfacción, la reducción de las motivaciones, los pensamientos pesimistas-negativos-repetitivos, dificultad para concentrarse, labilidad emocional…

Depresión a nivel físico

Por otra parte, nos encontramos con otras síntomas más físicos como: el insomnio, la pérdida de apetito y peso, los dolores de cabeza o bien la sensación de opresión en el estómago.

Estos síntomas impactan en nuestra estructura ósea, en nuestro cuerpo, de manera que pueden acabar influyendo en que adoptemos posturas de acorde a nuestro estado de ánimo.

Por ejemplo, si yo me siento feliz, vital y activo mi columna vertebral estará erguida y más recta y bien alineada. La zona del pecho y del tórax también estarán más expandidas con lo cual mi caja torácica, pulmones y musculatura respiratoria tendrán una biomecánica mucho más eficaz.

Esto facilitará que yo respire mejor y me sienta más vital, activo, alegre…de forma que retroalimentará positivamente mi estado de ánimo inicial.

Por el contrario, si sufro una depresión o alguna tendencia o comportamientos más depresivos; puede que mi postura sea de cierre con más flexión y retracción en la zona del pecho, con más curvatura dorsal por el decaimiento general y, probablemente, mi energía vital estará en defecto.

Las estructuras óseas y ligamentosas se tensionarán de manera que aparecerá dolor, tensión, malestar…retroalimentando el estado de ánimo inicial.

La importancia de la terapia integrada

De ahí la importancia de abordar los componentes emocionales, psicológicos que operan a un nivel más cognitivo ¡¡pero también los físicos!! algunas veces olvidados…

El abordaje o la intervención puede empezar tratando el cuerpo para generar cambios a nivel cognitivo o se puede realizar a la inversa; empezar con un trabajo psicológico-emocional para provocar cambios en el cuerpo (físico, a nivel de estructura).

Dependiendo de las características de la persona podrá ser más útil una vía de acceso u otra. Quizás una persona ya ha trabajado o elaborado mucho el trabajo para tratar la depresión a nivel psicológico y ahora está más receptiva a un trabajo más corporal.

El trabajo corporal

Se puede realizar utilizando técnicas pasivas como la terapia manual, las movilizaciones…o bien otras más activas: reeducación postural, estiramientos, técnicas de relajación, ejercicios respiratorios y de conciencia corporal.

Qué es el trabajo de la depresión con la terapia integrada

Cuando hablamos de una terapia integrada a través de dos disciplinas como la fisioterapia y la psicología; nos estamos refiriendo a que el ser humano no es sólo un cuerpo físico sino que tiene también una parte psicológico-emocional e incluso otra más sutil que es la energética.

Como hemos dicho, se suele trabajar o bien sólo el cuerpo o bien sólo la parte psicológica o emocional por separado.

En una intervención integrada entendemos el ser humano como un todo en el que las diferentes partes (física, psicológica …) no se muestran de forma aislada y separada sino que actúan de forma conjunta.

Por eso, lo trataremos observando las interacciones entre las diferentes partes y detectando cómo se modifican entre ellas.

¿En qué consiste una sesión?

La terapia integrada incluye:

Evaluación postural para observar las principales tendencias posturales, curvas, correcciones, compensaciones… a un nivel anatómico.

Desgraciadamente, nuestro cuerpo a menudo adopta posturas incorrectas de forma que los ejes corporales se desequilibran y aparecen las asimetrías.

Como consecuencia surgen las molestias articulares o musculares, la sobrecarga, el dolor, el malestar, las contracturas

Conciencia corporal (sentir/trasladar los síntomas al cuerpo)

Si conocemos el propio cuerpo y sus capacidades motrices, tendremos más herramientas y recursos para detectar nuestros puntos débiles o que nos generan más malestar y / o dolor y de esta manera centrar la atención en ellos con el fin de reconocer y aliviar la molestia.

Trabajo en el cuerpo (terapia manual)

A través de diferentes técnicas y procedimientos aplicados sobre los tejidos musculares, óseos, nerviosos…

Trabajo emocional 

Y psicológico de integración y auto-observación relacionando la dolencia/sensación física con el patrón/estructura a nivel más cognitivo.

En qué puede ayudarte una sesión de terapia integrada

• A entender como somatizas, transformando problemas psíquicos en síntomas orgánicos de manera involuntaria. Esto es así porque cuerpo y mente forman una unidad inseparable y se afectan mutuamente.
• Aumentar tu vitalidad y bienestar integrando tu parte física, emocional y energética.
• Incrementar tu conciencia corporal y poder detectar o prevenir posibles dolencias futuras.

Si estás pasando por una depresión sería bueno que pidieras ayuda, de forma que puedas adquirir las herramientas que te ayudarán a salir de este duro momento. Si quieres pedir consulta no te lo pienses.

Judit Puig Ariasol
Psicóloga y fisioterapeuta
formada en terapias naturales
juditpuig.cat
+34 617 50 19 08
Barcelona

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