Nuestro entorno esta afectado por múltiples influencias de carácter energético, tanto de origen natural como creadas artificialmente por el hombre. La contaminación electromagnética es una cuestión importante a evitar.

Emisiones artificiales

Las emisiones artificiales que más han crecido y no eran frecuentes en otras épocas son los campos de baja frecuencia.

Están representados en la alta tensión, cableado eléctrico, transformadores, uso de electrodomésticos, etc. así como las radiaciones de alta frecuencia base de las comunicaciones inalámbricas como la telefonía móvil, el WIFI o los teléfonos Dect, siendo muy raro actualmente no encontrar decenas de estas redes en cualquier comunidad de vecinos.

Algunas de estas emisiones, en valores altos de intensidad y exposición, están asociadas a problemas de salud y muchos investigadores relatan enfermedades tales como falta de concentración, insomnio, stress, dolores de cabeza, agitación nerviosa e incluso enfermedades más graves.

Es de dominio público el informe de enfermedades como la Lipoatrofia semicircular, en grupos de personas que trabajan en edificios enfermos donde unas de las variables importantes es una mala salubridad eléctrica.

La intención de este artículo es la prevención y el uso responsable de las tecnologías evitando el alarmismo.

Debemos tratar de beneficiarnos de las evidentes ventajas tecnológicas y evitar sus problemas con la mayor sensatez posible.

El problema, para la mayoría, es que la radiación electromagnética  actúa en un espectro poco evidente para los sentidos de percepción humanos, con lo cual establecer causas y efectos resulta más complejo, aunque existen grupos de personas que muestran una especial sensibilidad hacia las mismas, es lo que se conoce como personas «electro-sensibles», cada día en mayor número.

Contaminación por ALTA FRECUENCIA

El Wifi

Se engloba dentro de las altas frecuencias y funciona a través de impulsos de microondas.

Estas tienen la capacidad de atravesar las paredes de nuestras viviendas, así como el tejido biológico. Los valores de seguridad actuales están relacionados con los valores térmicos, habiendo pocos estudios “oficiales” sobre su impacto e interrelación con el sistema biológico.

El primer consejo que puede darse es evitar su radiación durante la noche ya que el momento de sueño es el más necesitado de un entorno exento de interferencias electromagnéticas para evitar estados como el insomnio o hiperactividad.

Tenemos alternativas al uso del Wifi como el cable apantallado de red mucho más seguro y salubre desde el punto de vista de la contaminación electromagnética.

Los modernos teléfonos digitales DECT

Que han sustituido al teléfono por cable clásico, actúan también en un espectro de alta frecuencia y es raro que cualquier vivienda moderna no disponga de una base emisora y algunos terminales.

El mayor problema de muchas bases es que emiten pulsos de radiación las 24 horas del día y 365 días al año, lo que representa que es como si tuviéramos  una mini-antena de telefonía móvil dentro de la vivienda, una mejor alternativa son los teléfonos ECO-DECT.

Cuando el problema proviene del exterior

Si no se tiene dominio sobre esta situación, existen en el mercado pinturas especiales de grafito para las paredes, textiles y vinilos para ventanas que pueden utilizarse para rechazar las microondas provenientes del exterior.

Esto requiere el análisis y consejo de una persona formada en prevención de contaminación electromagnética.

Poner sin conocimiento materiales de blindaje puede dar lugar a rebotes de señales y empeorar el problema original, así que es importante asesorarse con un profesional.

Debes saber que hay soluciones contrastadas para estos problemas y esto engloba también a las antenas de telefonía móvil que se instalan en algunas azoteas de edificios y que funcionan dentro del rango de las altas frecuencias.

Antes de nada  es importante que empieces creando un entorno más seguro en tu propia casa siguiendo estos consejos:

5 medidas importantes:

1. Intenta no abusar del uso del teléfono móvil. Utiliza opciones como el uso de un manos libres o bien textiles de blindaje que impidan que la antena pulse directamente sobre tu cráneo.  Por supuesto intenta desconectar el terminal durante la noche.
2. No dejes encendido todo el día el WIFI de tu Router para el acceso a Internet y apágalo como mínimo durante la noche. La mejor recomendación es que sustituyas el acceso inalámbrico, mediante un cable de red.
3. No utilices teléfonos inalámbricos DECT corrientes para tu vivienda, ya que emiten grandes dosis de radiación. Si no tienes más opción que utilizar un teléfono inalámbrico, mira las opciones tipo ECODECT, que al menos evitan la emisión cuando el teléfono está descansando en la base.
4. Vigila las fuentes emisoras que provienen de alarmas o sistemas de grabación inalámbrica y no permitas su instalación junto a dormitorios.
5. Observa bien tu entorno, antes de adquirir una nueva vivienda y evita los lugares donde a pocos metros encuentren antenas repetidoras de telefonía móvil, radares, etc.

Contaminación por BAJA FRECUENCIA

La contaminación por baja frecuencia se suele originar a través del cableado eléctrico, torres de suministro, transformadores, ciertos electrodomésticos, etc. ocasionando problemas de campos eléctricos y campos magnéticos. 

Es importante que sepas, en cuanto al campo eléctrico, que se pueden encontrar soluciones  a través de una buena toma de tierra y materiales para su derivación.

Respecto al  campo magnético existen algunas aleaciones como el Mumetal que pueden servir de ayuda, pero requieren un estudio muy riguroso de cada caso.

Si bien no es posible, en una ciudad moderna, tener un espacio totalmente neutro, desde el punto de vista la contaminación electromagnética, mediante los consejos que te damos, podemos conseguir reducir de manera significativa las interferencias electromagnéticas sobre nuestro cuerpo y ganar así mayor concentración y descanso, acercándonos en alguna medida a lo que ofrece un entorno de naturaleza virgen, lugar de referencia para establecer cualquier medición comparativa.

Por último,  utiliza el mayor sentido común posible y no te obsesiones por los posibles efectos de campos electromagnéticos, eso  no quiere decir que no realices un estudio serio de los mismos y las comprobaciones necesarias.  

Estamos expuestos a innumerables variables que ejercen efectos sobre la salud como: la calidad del aire, la alimentación, las relaciones personales, el espacio físico… y al final debemos mantener siempre el mayor equilibrio y conciencia global sobre lo que nos afecta.

8 formas de reducir la contaminación por baja frecuencia:

1. Intenta evitar aparatos eléctricos o cableado eléctrico cercano al cabezal de su cama mientras duermes.
2. Mantén el rostro o cabeza a una distancia prudencial de tubos fluorescentes o lámparas.
3. Evita trabajar con ordenadores portátiles sobre tu cuerpo durante periodos prolongados, más aun si están conectados a la red.
4. No deje que tus hijos se aproximen en exceso al televisor o monitor.
5. Vigila los lugares donde descansas, cerca de una  pared que oculta aparatos como microondas, frigoríficos, hornos eléctricos, o electrodomésticos de gran consumo, etc.
6. No abuses de ropa, materiales y superficies plásticas que tienden a cargarse estáticamente.
7. No olvides la importancia de tener una adecuada toma de tierra en casa para reducir la contaminación por campos eléctricos, es una cuestión fundamental.
8. Si has de adquirir o alquilar  una vivienda, evita la cercanía extrema de torres de alta tensión o transformadores.

Silvestre Pérez
Director y Maestro en
Escuela de Feng Shui Natural
www.fengshuinatural.com