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La salud de tus pies. 8 Problemas frecuentes
La salud de tus pies es francamente importante. Son los encargados de soportar, siempre y como mínimo, el peso de tu cuerpo y realizan miles de movimientos cada día en los que se utilizan los tendones, articulaciones, músculos, etc. de su anatomía.
No olvides su cuidado durante todo el año y a todas las edades.
Es de gran importancia el cuidado de los pies porque, además de las patologías propias, su fallo se relaciona con otras que afectan a diferentes niveles (rodilla o espalda, por ejemplo).
Pisar bien es fundamental para mantener las estructuras musculoesqueléticas en perfectas condiciones y puedes evitar ciertos dolores frecuentes si los tratas correctamente.
Tus pies también son importantes
No sólo en verano, que es cuando todos nos damos cuenta de que existen, sino en todo momento. Lamentablemente, nos olvidamos de ellos hasta que sufrimos un problema o pedimos cita para hacernos una pedicura.
Puedes actuar preventivamente si acudes al podólogo de manera regular y sigues sus consejos profesionales, pues es el más capacitado para dártelos. Aunque su labor es muy amplia, la visita regular a su consulta debería formar parte de una pauta de prevención similar a la de acudir al dentista o al oftalmólogo.
Problemas en los pies
Destacarían:
- Callos en los dedos por rozamiento con el calzado.
Se pueden prevenir usando calzado cómodo e hidratando la piel, pero, una vez formado, debe ser eliminado. - Juanetes causados por procesos artrósicos que suelen necesitar cirugía.
- Verrugas en las plantas, que deben ser extirpadas.
- Problemas en las uñas que se clavan en el dedo y producen dolor e infección, que deben ser tratados.
- Adaptación de plantillas ortopédicas para corregir, por ejemplo, el pie plano.
- Seguimiento de las patologías del pie diabético.
- Neuroma de Morton, que precisa plantillas o cirugía.
- Dedos en garra, a tratar con ejercicios específicos y cirugía.
6 recomendaciones para la salud de tus pies
- lavarlos a diario con jabones neutros y secarlos para evitar la proliferación de hongos
- hidratarlos con una crema adecuada
- eliminar el mal olor y el sudor con desodorantes y antitranspirantes específicos
- no repitas zapatos; déjalos secar y no los uses hasta el día siguiente
- exfoliar para evitar la formación de grietas y durezas, pues eliminan las células muertas, lo que permite una mayor hidratación
- si tienes una rozadura, cúbrela para evitar infecciones y cambia de zapatos
Puedes prevenir y mejorar la salud de tus pies
- Hacer ejercicios adecuados como las rotaciones de los tobillos o caminar de puntillas y talones alternativamente, sin que sientas dolor.
- Utilizar un calzado adecuado en cuanto a la talla, la forma, el tacón, el material, etc.
- Mantener secos los pies y prestar una atención especial al espacio entre los dedos.
- Colocar los pies en posición elevada para descansar.
- Aplicar cremas hidratantes con un masaje que resulta relajante y favorece la circulación.
- Cuidar las uñas y mantenerlas con un tamaño óptimo (ni cortas, ni largas).
- Evitar las rozaduras.
- Eludir los contagios (normalmente hongos) en piscinas comunitarias, duchas, etc. usando chanclas.
- Puedes utilizar pequeños recipientes de hidromasaje que alivian las molestias y proporcionan un masaje muy agradable y beneficioso.
Elige bien tu calzado
Es muy importante, pues muchos problemas en los pies se relacionan con el uso de un calzado inadecuado.
Debe tener una horma recta y una suela dura y flexible de material de cuero, goma o crepé. La longitud debe ser la misma que la del pie cuando pisa y la anchura la misma del pie medido por la planta y al pisar.
No debe tener tacón alto, puesto que, al elevar la parte posterior del pie, se produce un plano inclinado que desequilibra el sistema, alterando la funcionalidad de la pantorrilla pues retrae el músculo y causa patologías.
Carmen Reija
Farmacéutica,
Óptica y Tecnóloga de alimentos.
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