¿Vivimos para comer o comemos para vivir? Comemos para generar una buena calidad de sangre

Una alimentación sostenible, consciente y energética es del todo posible.  Todo depende de nuestras acciones, y los resultados son buenos para todos, nuestro cuerpo, nuestra energía y para el planeta.

Nuestro cuerpo siempre busca ésta fórmula magistral: un pH equilibrado para poder dar a todos los órganos del cuerpo lo que necesitan.

Hay alimentos que nos generaran una sangre ácida, con la que construimos stress, enfermedad y desequilibrio y hay alimentos que generan una sangre ligeramente alcalina, para producir energía, vitalidad y salud. ¡De nosotros depende crear un estado o u otro! No es cuestión de buena o mala suerte, es cuestión de consciencia y entendimiento.

Somos los creadores de nuestra vida, a todos los niveles. Con nuestra forma de pensar, sentir, actuar y comer, creamos nuestro Presente. ¿Nos gusta cómo es? En caso afirmativo, felicitaciones, podemos seguir haciendo lo mismo para crear un idéntico futuro.

En el caso opuesto, si sentimos que deseamos un cambio, no podemos seguir haciendo lo mismo, porque no habrá cambio. Hay que modificar nuestras acciones, pensamientos y hábitos para que nuestro futuro sea como lo deseamos.

Una alimentación sostenible y consciente se basa en alimentos naturales

Originarios principalmente del campo, de lo que nuestra madre Tierra nos proporciona. Alimentos primarios, sin procesar, los mismos alimentos que se han utilizado durante miles de años por nuestros antepasados: CEREALES INTEGRALES, LEGUMBRES, PROTEÍNAS VEGETALES, VARIEDAD DE VERDURAS, FRUTAS, SEMILLAS, FRUTOS SECOS, VERDURAS DEL MAR (Algas) y PESCADO.

Cuando hablamos de cereales, no hablamos de un paquete de algo hinchado con azúcar, chocolate y que se le denomina cereal, estamos hablando de semillas de vida y energía, que contienen todavía toda la memoria universal de VIDA. Hablamos de cereales integrales de grano entero, tales como: el arroz, mijo, quínoa, trigo sarraceno, cebada, avena, espelta…, etc.

Si utilizamos alimentos locales del campo en su forma más primaria y original (sin procesar, ni refinar), respetaremos las estaciones, utilizando y disfrutando de lo que la naturaleza nos ofrece en cada momento, no tendremos que importar alimentos del otro lado del planeta, que contribuyen a la contaminación y destrucción medioambiental, creando así, una alimentación totalmente sostenible para todos.

Esto lo que deseamos de corazón. Una alimentación que abastezca a toda la humanidad en abundancia.  PIENSA GLOBAL, COCINA LOCAL.

Somos lo que comemos

Todo lo que comemos o bebemos nos generara un efecto.  ¡Todo en la Naturaleza tiene su propia energía y fuerza vital! Nuestro abuelo Hipócrates ya nos lo comunicaba con su legado: “QUE LA MEDICINA SEA TU ALIMENTO, Y EL ALIMENTO TU MEDICINA”

Sabemos muy bien las diferentes reacciones que nos generara un vaso de agua, de whisky, de tila o un expreso doble. Esto lo podemos diferenciar y comprender. Pero no tenemos consciencia de todo lo que ingerimos durante el día, ni qué efectos nos generan, hasta que al final nuestro cuerpo ya no nos susurra, ¡sino que nos aúlla!

A nivel global, estamos todavía en un estado muy infantil de entender la alimentación. Comemos de forma ciega (primaria) porque tenemos hambre, o porque algo nos gusta (sensorial), o porque lo hemos comido toda la vida (emocional), ¿pero qué efectos nos produce?

Puede que empecemos a ver la alimentación de forma intelectual, contando calorías o carbohidratos, deseando entenderlo de forma mental.

Creo que es importante saber lo que nuestro cuerpo necesita, pero también, entender la alimentación de forma más consciente y energética, aprendiendo las reacciones de todo lo que decidimos ingerir durante el día y sabiendo sus efectos en nuestros cuerpos (físico, mental, emocional).

Con una alimentación consciente, podemos decidir qué efectos deseamos tener durante el día, y aplicar este conocimiento para ayudarnos a realizar nuestras metas en la vida. Aquí la persona se responsabiliza  de lo que escoge y sabe que efectos le generará.

El conocimiento de los efectos de los alimentos y de sus preparaciones nos puede abrir un camino totalmente desconocido, un camino hacia el entendimiento de nuestras necesidades y como aplicarlo libremente a cada momento.

Comer alimentos naturales es importante, pero todavía nos falta el 95% restante, que es aplicar alquimia a estos alimentos, saberlos como cocinar y combinar para que nos aporten el resultado que deseamos.

Nuevos hábitos para una vida sana

• Usar productos integrales, sin refinar o procesar.
• Usar alimentos locales y del mismo clima.
• Usar principalmente productos ecológicos
• Volver a la cocina casera y “de la abuela”
• Adaptar la alimentación a los cambios estacionales.
• Alimentarnos de acuerdo a nuestras necesidades personales.
• Escuchar nuestra intuición y los mensajes de nuestro cuerpo.

Montse Bradford
Pionera en la Alimentación Natural y Energética
Escritora, terapeuta y formadora
www.montsebradford.es

Atrévete a empezar a comer saludable, consciente y de forma sostenible, aquí te dejamos la receta «Espárragos con aliño de aguacate«